Que nuestro hijo se haga una herida será una situación muy frecuente en la que tendremos que saber actuar y viene bien tener las ideas claras de cómo hacerlo y sobre todo en qué casos tenemos que recurrir a urgencias o consultar con el pediatra.
¿CÓMO DEBEMOS CURARLA?
Si vemos que es un corte pequeño y sangra poco se recomienda:
–Lavarnos las manos con agua y jabón.
–Lavar la herida con agua para limpiarla del polvo y suciedad, de ser posible también con un jabón suave y enjuagarla completamente.
–Secar la herida evitando algodones, lo ideal es con gasa estéril.
–Aplicar una solución antiséptica (clorhexidina).
–Dejar secar y cubrir la herida con una banda adhesiva esterilizada (tirita) o con una cinta de gasa esterilizada.
–Revisar la herida diariamente para valorar su buena cicatrización.
–Mantener la tirita o venda seca y cambiarla si se moja o ensucia.
-Retirar la venda o tira cuando se ve que ya la herida esta cicatrizada y/o tiene costra.
Cuando la herida es grande o sangra mucho se recomienda:
–Lavarnos las manos con agua y jabón.
–Lavar la herida cuidadosamente con abundante agua para poder valorarla mejor y apreciar su tamaño, bordes y profundidad.
–Presionar con la palma de la mano la herida con una gasa estéril o un paño limpio durante unos 5 minutos para luego valorar cómo sigue su sangrado, si la sangre empapa la gasa no se debe retirar, más bien utilizar otro trozo de gasa y colocarla encima de la anterior para continuar aplicando presión sobre la misma.
–Si tiene dolor se le puede dar un analgésico para su alivio (Ibuprofeno o Paracetamol).
¿CUÁNDO DEBEMOS CONSULTAR?
–Cuando no se pueda detener el sangrado después de 5 minutos, en ese caso, continuar aplicando presión sobre la misma hasta tener atención médica.
-Cuando no se pueda limpiar la herida completamente, o si se observa que tenga algún cuerpo extraño en su interior.
–Si la herida es más grande de un centímetro, o si parece profunda sospechando que pueda requerir puntos de sutura.
–Si la herida está localizada en cuello, cara, pliegues o genitales.
–Si la herida fue causada: por la mordida de un animal o un humano, una quemadura, un accidente eléctrico o una perforación (por ejemplo, un clavo) o por un objeto sucio (clavo o alambre).
-Si se ha producido la separación de parte del cuerpo (por ejemplo, la falange de un dedo). Recoja la porción perdida, introdúzcala si en posible en un a bolsa con agua fría). En estos casos de urgencia inmediata, llame a los servicios de emergencia (112), comunique lo ocurrido y siga sus instrucciones.
-Consulte si tiene cualquier duda o si nota que su cicatrización no es adecuada.
¿QUÉ DEBEMOS VIGILAR?
-Revisar la herida diariamente, para valorar su buena cicatrización y descartar que no tenga signos de infección como bordes de la herida inflamados o enrojecidos, hinchazón, calor al tacto o segregando pus.
-Vigilar que el niño no presente: fiebre, malestar o escalofríos.
-Las cicatrices pueden ponerse más oscuras, para evitarlo, protéjalas del sol durante unos 6 meses.